¿Sabías que el acumulamiento de cosas en el hogar y el desorden están
relacionados a diferentes clases de miedos (al cambio, a ser olvidado o
a olvidar, a la carencia)? Además, simbolizan confusión, falta de
enfoque, caos, inestabilidad y pueden significar incertidumbre acerca de
tus metas, tu identidad o lo que quieres de la vida. El lugar de la
casa en el que el desorden o el acumulamiento se encuentran refleja qué
área es problemática en tu vida. Por ejemplo, se dice que el clóset, o
vestidor, refleja cómo te encuentras emocionalmente y que una vez lo
organices tus conflictos internos se calmarán, o que una sobrecama
desteñida significa que tu vida amorosa ha perdido brillo también.
❍ Diferentes clases de acumulamiento
• Acumulamiento nuevo: Este
acumulamiento indica que estás tratando de hacer demasiadas cosas a la
vez, que no te estás enfocando en lo que debes hacer y que has perdido
la dirección. Este acumulamiento o desorden incluye ropa apilada, cd’s o
películas, juguetes o artículos deportivos desparramados, cosas que has
usado recientemente pero no has puesto de vuelta en su sitio. La manera apurada en que vivimos tienden a crear este
tipo de desorden y casi todos los tenemos en nuestro hogar en alguna
medida. Organizar este tipo de desorden en forma inmediata te ayuda a
ser más centrado y efectivo en tu vida diaria.
• Acumulamiento antiguo: objetos que no usaste en un largo tiempo y
que están apilados en el ático, garage, armarios; papeles de trabajo
viejos y documentos en tu computador que ya no usas; revistas de hace
más de 6 meses o ropa que no te has puesto en más de un año. Esto es
reflejo de que estás viviendo en el pasado y estás dejando que tus
viejas ideas y emociones se apoderen de tu presente y esto a la vez
evita que nuevas oportunidades y personas entren en tu vida.
❍ 10 cosas que puedes hacer hoy mismo para controlar el desorden
•
Deshazte de lo más grande primero: la bicicleta de hacer ejercicios que
ya no usas o el oso gigante de peluche que conservas desde la época de
colegio.
• Devuelve las cosas que te hayan prestado: cds, libros, ropa, herramientas. Recoge lo que esté en el suelo y colócalo en un canasto o bolsa hasta que puedas tomarte el tiempo de ponerlo en su sitio.
• Recoge revistas, catálogos y periódicos en una bolsa o canasto.
• Saca del armario 10 prendas que no hayas usado en el último año y dónalas.
• Limpia las ventanas, es una manera figurativa y literal de dejar entrar la luz a tu vida.
• Vacía los cestos de basura, baños, cocina, oficina; representan cosas que ya no necesitas o quieres en tu vida.
• Saca de los cajones de tu armario las medias sueltas que han perdido su compañera, puedes usarlas para limpiar muebles.
• Despeja el escritorio, archiva papeles que ya no uses, revisa y organiza el correo recibido.
• Deshazte de lapiceras y marcadores que no funcionen.
Descripción: colores med
❍ El Significado del Desorden en Nuestro Hogar
Los seres humanos
emitimos mensajes y señales de acuerdo con el acomodo de nuestros
objetos personales, incluso en nuestros cajones. La acumulación de
objetos es una forma de emitir señales; demasiados objetos emiten la
señal de saturación de ideas, proyectos y planes totalmente confusos,
muy poco estructurados y definidos. El desorden altera el tao o el
camino para obtener nuestras metas. Bloquea las vías de acceso de
oportunidades y nos hace perder tiempo, que puede ser valiosísimo para
estructurar de manera ordenada y disciplinada nuestro plan de vida.
Dependiendo del lugar donde se acumule el desorden, es el mensaje o señal que se está emitiendo:
• Si hay desorden u objetos amontonados en la entrada de la casa, se interpreta como miedo a relacionarse con otras personas.
•
Si hay desorden u objetos amontonados en el clóset, el mensaje es que
no se tiene el control sobre el análisis y el manejo de las emociones.
• Si hay desorden u objetos amontonados en la cocina, la señal es de resentimiento o de fragilidad sentimental.
•
Si hay desorden en el escritorio o área de trabajo, el mensaje es de
frustración, miedo y necesidad de controlar las situaciones.
• Si hay
desorden detrás de las puertas, el mensaje es de miedo a no ser
aceptado por los demás, sensación de sentirse vigilado constantemente.
• Si hay desorden debajo de los muebles, el mensaje es que se le da demasiada importancia a las apariencias.
• Si hay desorden u objetos acumulados en bodegas, el mensaje es que se vive del pasado.
• Si hay desorden u objetos acumulados en el garaje, el mensaje es de temor y falta de habilidad para actualizarse.
•
Si hay desorden y objetos amontonados por toda la casa, el mensaje es
de enojo, desidia y apatía hacia todos los aspectos de la vida.
• Si
hay desorden u objetos acumulados en pasillos, el mensaje es de
conflictos para comunicarse, miedo a decir y manifestar lo que se desea
en la vida.
• Si hay desorden u objetos acumulados en la sala, el mensaje es de temor al rechazo social.
•
Si hay desorden en el comedor, el mensaje es de miedo a no dar pasos
firmes y sólidos, sensación de dominio por parte de la familia.
En los casos en los que tenemos antigüedades u objetos heredados,
éstos se impregnan de la energía de aquellas personas a las que han
pertenecido. Un ritual para limpiarlos es hacerlo con incienso o aceite
esencial natural de algún cítrico como naranja, limón, toronja o
mandarina.
Después de haber acomodado todo ese desorden, ya hemos dado el
segundo paso. Ahora pasamos al tercer paso: limpiar o despejar la
energía de nuestros espacios de vida. Esto te ayudará a convertir tus
espacios en lugares sagrados, en el cual encontraras más sentido a tu
vida y serás más asertivo en tus decisiones y proyectos.
Sobre el desorden, Louis L. Hay dice:
Haga lugar para lo nuevo.
Vacíe el frigorífico, tire todos esos restos envueltos en papel de
aluminio. Limpie los armarios, deshágase de todo lo que no haya usado en
los últimos seis meses. Y si hace un año que no lo usa, decididamente
eso está de más en su casa, así que véndalo, cámbielo, regálelo o
quémelo.
Los armarios atestados y desordenados reflejan una mente en desorden.
Mientras limpia los armarios, dígase que está limpiando sus armarios
mentales. Al Universo le encantan los gestos simbólicos.
Desconozco el autor