
La reencarnación hace referencia a la multiplicidad de vidas físicas o
encarnaciones, es decir, que un mismo ser o espíritu que ha animado un
cuerpo desde el nacimiento hasta la muerte puede volver a encarnar en un
nuevo recién nacido y vivir una nueva vida en el mundo físico.
¿Cuál es el objetivo de la reencarnación respecto a la evolución espiritual?
El aprendizaje espiritual se asemeja al que tiene lugar en la
escuela. En la escuela existe una alternancia de periodos de estudio con
periodos de evaluación o examen, donde el alumno tiene que demostrar lo
que ha aprendido. Lo mismo ocurre con el aprendizaje espiritual. En la
etapa de desencarnado el espíritu estudia y se prepara espiritualmente.
En el periodo de encarnado se trata de poner en práctica lo que se ha
aprendido sin ningún tipo de coacción, es decir por voluntad libre del
espíritu encarnado. Cada encarnación es una oportunidad de evaluación de
un curso en particular. Si se supera esta evaluación se pasará al
estudio de un curso más avanzado, que se iniciará en el plano espiritual
con el aprendizaje de nuevas enseñanzas espirituales. Cuando el
espíritu está preparado y sus nuevos conocimientos asimilados, volverá a
encarnar para afianzarlos en su interior con la práctica.
Pues a mí me parece que hay personas que afrontan en la vida pruebas muy duras que yo no sé si sería capaz de superar.
En cada encarnación cada espíritu afronta unas pruebas que son
propias de esa encarnación y que están de acuerdo con su capacidad
espiritual. El espíritu conoce antes de encarnar qué tipo de pruebas
necesita para avanzar y se prepara concienzudamente para poder
superarlas con éxito en el periodo en el que no está encarnado, al igual
que el deportista que participa en una final de competición no llega a
ésta por casualidad, sino que se ha entrenado concienzudamente durante
todo el año, habiendo superado previamente diversas pruebas de
calificación. Por tanto, a nadie se le enfrenta a pruebas que no puede
superar.
No entiendo cuál es la necesidad de la reencarnación. ¿Por qué es necesario vivir más veces en el mundo físico?
¿Acaso un alumno acaba su formación en un solo curso? Aunque haya
aprendido muchas cosas en un sólo curso, siempre habrá algo que no haya
podido aprender y que requiera más tiempo. El espíritu en evolución es
también un alumno y también necesita de más de un curso, es decir de más
de una vida, para aprender todo lo que necesita y quiere.
¿Y no podría vivirse aquí una vez y luego pasar a otro plano de la
existencia y seguir allí evolucionando sin necesidad de volver a la
Tierra?

Podría pero, al igual que sería un despilfarro tirar un vestido
después de habérnoslo puesto una sola vez, sería una infrautilización
del mundo material que sólo pudiéramos usarlo una única vez, unos 100
años como máximo que puede durar una de vuestras vidas físicas, con la
de miles de millones de años que ha costado que se forme un planeta y
que se hayan desarrollado las condiciones para albergar vida. Es una
cuestión de optimización de recursos. ¿Acaso vosotros tenéis escuelas
para un sólo año? En vuestro mundo, un alumno pasa al menos seis años en
el mismo colegio sin necesidad de cambiar de centro. Por ejemplo, en un
colegio de primaria, el alumno estará desde los 6 a los 12 años. Sólo
cuando el alumno completa su formación de primaria y pasa a la enseñanza
secundaria, cambia de centro. Pues lo mismo ocurre con el espíritu en
formación. Vuestro planeta es como una escuela de primaria donde los
espíritus en edad de primaria vienen a aprender. Cuando el espíritu haya
aprendido todo lo que esa escuela, es decir, ese mundo, pueda
enseñarle, podrá entonces pasar a otra escuela en la que se imparta una
educación superior, es decir, podrá encarnar en otro mundo más acorde
con su nivel evolutivo y necesidades de aprendizaje. Mientras,
continuará evolucionando en ese mundo, o en otro de semejante nivel.
¿Y por qué si hemos vivido antes, no nos acordamos de otras vidas?
Es una necesidad del espíritu en vuestro actual estado evolutivo.
¿Y por qué necesitamos olvidar ese supuesto pasado de otras vidas?
Es necesario para concentraros en los objetivos de la actual vida,
sin que haya recuerdos propios o de otras personas que impidan que el
espíritu actúe con libre albedrío, para que su actuación no esté
condicionada por los actos del pasado.
Esto parece estar en contradicción con la ley de evolución
progresiva, ya que si el espíritu no puede recordar lo aprendido en
vidas anteriores, ¿no es como si volviera a empezar de cero cada vez?
Se
olvidan los recuerdos concretos pero no lo aprendido espiritualmente.
Esto queda retenido por el espíritu en su memoria espiritual, aunque no
en la memoria física, que ciertamente parte de cero en cada encarnación.
Para que entendáis esto os pondré un ejemplo de vuestros días.
Imaginaos que alguien inicia su primer curso de aprendizaje en
informática y se le asigna un ordenador para realizar el curso, para que
practique y guarde en la memoria del ordenador, todos los ejercicios y
los trabajos del curso. Cuando llegue al final del curso el alumno habrá
aprendido una serie de aspectos de la informática. En el curso
siguiente cambiará de clase y cambiará de ordenador. Se le asigna un
nuevo ordenador con la memoria a cero, y con mayor capacidad de
procesamiento y de memoria para que pueda disponer de toda su capacidad
para ampliar sus conocimientos. Aunque el alumno no haya podido
transferir los documentos y ejercicios de la memoria del primer
ordenador a la del segundo, lo que ya ha aprendido sobre Informática, no
lo va a olvidar. Con este conocimiento podrá configurar el nuevo
ordenador a su gusto, no partiendo de cero, sino haciendo uso de los
conocimientos adquiridos en el primer curso, y esto es independiente de
lo que le ocurra al ordenador antiguo o de los datos creados. Cuando el
espíritu encarna en un nuevo cuerpo, ese cuerpo es como ese ordenador
nuevo con la memoria a cero que se le da al alumno al iniciar el curso,
que el alumno irá empleando para aprender. Con el tiempo, el cuerpo
físico se desgasta hasta el punto de que no le sirve al espíritu para
seguir avanzando. Entonces es cuando se hace necesario “jubilar” el
ordenador viejo, es decir, desencarnar. La memoria física, el cerebro,
se descompone con el resto del cuerpo, pero no la memoria espiritual,
que retiene todo lo aprendido en esa vida. En el estado de desencarnado,
el espíritu puede acceder a todos los detalles de encarnaciones
anteriores, ya que deja de estar restringida su capacidad a la capacidad
del cuerpo físico.
Entonces ¿podremos recordar todas nuestras vidas anteriores cuando hayamos muerto?
Todo lo vivido en las encarnaciones de un espíritu, y del periodo
entre vidas físicas queda archivado para uso personal del espíritu,
aunque mientras el espíritu está poco evolucionado, su capacidad de
explorar en esta memoria esta restringida a las vidas más recientes. La
penetración en la memoria espiritual de las vidas anteriores aumenta
conforme el espíritu evoluciona.
Sigo sin ver necesario el olvido de otras vidas. ¿En qué le puede
perjudicar al espíritu el recuerdo de otras vidas? Yo creo que sería más
bien al contrario. Si el espíritu conserva la memoria de sus vidas
pasadas, ¿no tomará mayor conciencia del proceso evolutivo y aprovechará
mejor la encarnación para evolucionar?
El razonamiento que haces es correcto para los espíritus que han
alcanzado ya cierto nivel evolutivo, pero no para los espíritus menos
avanzados, a los que un exceso de información podría obstaculizar su
desarrollo, por no saber emplear correctamente este conocimiento. De
forma que el conocimiento se va haciendo accesible a medida que el
espíritu va evolucionado y va esforzándose por buscarlo.
Pues me tendrás que poner un ejemplo para que entienda lo que quieres
decir, porque no me queda claro en qué manera pueden entorpecer la
evolución de un ser los recuerdos de las vidas pasadas.
Vale. Imaginad que alguien ha sido un asesino en una vida pasada y
que tanto él cómo otros espíritus que convivieron con él recuerdan las
fechorías que cometió. Este espíritu ahora ha reflexionado respecto al
daño que hizo y tiene el propósito de enmendarse en la nueva vida que ha
comenzado. Imaginad que volviera a encarnar en medio de las personas
que convivieron con él y que recuerdan lo que hizo. En esas
circunstancias, el espíritu estaría marcado por su pasado y seguramente
recibiría el desprecio continuo de las personas que recuerdan que fue un
asesino y que no son suficientemente avanzadas espiritualmente para
comprender que todos hemos errado en el pasado y que todos hemos
necesitado de innumerables oportunidades para rectificar. Podría haber
algunos que quisieran ajustarle las cuentas, tomarse la revancha por las
cuentas pendientes del pasado. Asimismo, el espíritu podría, bajo esa
presión del entorno, torturarse emocionalmente o, lo que es peor,
vengarse de aquellos que le oprimen y volver a retomar
sus actividades delictivas, con lo cual, lejos de conseguir una mejora, estaríamos condenándole al estancamiento espiritual.
¿Y cómo le beneficiaría el olvido de las vidas pasadas?
Podéis considerar como si el espíritu se hubiera acogido a un
programa de protección de testigos, en el que al testigo protegido,
antiguo delincuente, a raíz de querer colaborar con la justicia, y para
evitar represalias de sus antiguos compañeros, se le da una nueva
identidad, un trabajo nuevo en un lugar diferente, para que inicie una
nueva vida lejos del peligro, con el objetivo de reinsertarle en la
sociedad. En este caso, este efecto, el de la nueva identidad, se
consigue mediante la reencarnación y el olvido de las vidas pasadas.
¿Y siempre ha de ser así, es decir, nunca podremos recordar lo que
hemos hecho en vidas anteriores mientras estemos encarnados, sin esperar
a la muerte?

Nunca no. De hecho, como te dije al principio, existen personas que
tienen recuerdos esporádicos de otras vidas, sobre todo en la infancia, y
algunos consiguen recordar algunos detalles a través de hipnosis
regresiva. En Oriente, se conocen muchos más casos de recuerdos
espontáneos de vidas pasadas en niños que en Occidente. Y esto se debe a
que al ser regiones en las que se cree en la reencarnación, los padres
no reprimen a los niños cuando éstos cuentan lo que recuerdan. Pero el
recuerdo consciente sólo será posible cuando en el mundo encarnen
mayoritariamente espíritus que hayan avanzado suficiente en el
aprendizaje del amor para no utilizar el pasado como excusa para no
amar. Recordaréis cuando comprendáis que todos somos hermanos y que
hemos errado en el pasado, y que todos hemos necesitado de innumerables
oportunidades para rectificar. Así ocurre en mundos más avanzados, en
los que recordar una o varias vidas anteriores es lo normal.
Pues, ahora que sacas a colación el tema, no me parece que en las
zonas donde predominan las religiones orientales, que creen en la
reencarnación, como el hinduismo y el budismo, estén mejor que nosotros.
Ahí está el ejemplo del hinduismo, donde la creencia en la
reencarnación se utiliza para justificar las desigualdades entre
humanos. Me refiero al sistema de castas.
Para que veas un ejemplo de que es la evolución interior y no el
conocimiento exterior lo que hace que el espíritu evolucione, ya que aun
creyendo en la existencia de la reencarnación, han manipulado su
significado para justificar su egoísmo. También es un ejemplo de que
para los espíritus menos avanzados, un exceso de información obstaculiza
su desarrollo evolutivo, por no saber emplear correctamente este
conocimiento. Los hinduistas que justifican el sistema de castas, sin
conocer el pasado directo del espíritu, ya están presuponiendo que el
que se encarna en la casta de los intocables ha debido ser alguien que
ha actuado mal en otra vida, y lo utilizan como excusa para, en vez de
ayudarle, hacerle la vida lo más difícil posible. ¡Qué lamentable
conclusión, basada en el egoísmo del que, tras encarnar en la casta más
favorecida materialmente, en lugar de echar una mano al desfavorecido,
se la pisa para que ni siquiera por su propio esfuerzo salga de la
miseria! De esta forma, en la próxima encarnación, los que se creyeron
mejores por haber sido materialmente favorecidos, sí que se exponen a
encarnar en una situación de miseria como la de los intocables, para que
sientan en carne propia lo que es la miseria, el racismo y la
incomprensión. Con esta experiencia, cuando estén en situación de
cambiar el estado de las cosas, por ejemplo, volviendo a encarnar en la
casta dominante, tal vez se acuerden de lo que aprendieron interiormente
en la vida anterior en la que fueron intocables y trabajen por la
abolición del sistema de castas. Por el contrario, el budismo, de origen
posterior y espiritualmente mucho más avanzado, al tiempo que mantiene
la creencia en la reencarnación, incorpora la creencia en el amor al
prójimo, y no busca ya argumentos para oprimirlo, de manera que los
budistas son creyentes en la reencarnación pero no “castistas”, es
decir, están en contra del sistema de castas
Vicent Guillen