Ética Rosacruz

Sabiduría en acción

Desde el punto de vista rosacruz, la sabiduría es un estado de consciencia que se va adquiriendo progresivamente en la vida, a través del trabajo interior y estando en contacto con el mundo material, lo que posibilita realizar una alquimia espiritual, tan querida para los Rosacruces. Esta alquimia consiste en transmutar nuestros defectos en sus cualidades opuestas: el orgullo en humildad, el egoísmo en generosidad, etc. De esta forma, la sabiduría se manifiesta en el hombre a través de ciertas virtudes, que forman parte del bagaje ético y espiritual que todo iniciado digno de este nombre debe manifestar en su vida diaria. En este sentido, la ética rosacruz es una bella exhortación a su desarrollo.

• Sé paciente, porque la paciencia alimenta la esperanza y hace del tiempo un aliado sobre el sendero de la vida.
• Sé confiado, porque la confianza en uno mismo es una fuente de realización interior, y aquella que se concede a los demás es una fuente de amistad.
• Sé moderado, porque la templanza evita caer en los excesos y procura el sosiego.
• Sé tolerante, porque la tolerancia engrandece el espíritu y favorece las relaciones humanas.
• Sé desapegado, porque el desapego es un testimonio de libertad y cultiva la riqueza interior.
• Sé generoso, porque la generosidad hace bien tanto al que da como al que recibe.
• Sé integro, porque la integridad es garantía de buena conciencia y aporta serenidad.
• Sé humilde, porque la humildad engrandece al que da prueba de ella y le vale el respeto de los demás.
• Sé valiente, porque el coraje te construye diariamente y te vuelve más fuerte ante la adversidad.
• Sé pacífico, porque la no-violencia genera armonía interior y difunde la paz entre los seres.
• Sé benévolo, porque la benevolencia regocija al corazón y embellece el alma.

Logrado esto, se podrá decir de ti que eres sabio, porque la sabiduría es la aplicación de estas virtudes…