Estamos
a punto de finalizar el mes de noviembre y con ello, entramos ya a la
recta final de este 2014 donde hemos seguido un proceso interesante a
nivel colectivo e individual.
Como hemos dicho desde el principio del 2014,
este año era el año de “La Justicia”, un año para restablecer el orden
perdido y poner cada cosa en su justo lugar. Tomar el lugar que nos
pertenece por derecho propio.
Para restablecer este orden, hemos tenido que
poner mucho de nuestra parte, creando acciones contundentes. Pero
también, el universo a puesto de su lado, haciendo que todo lo que había
permanecido escondido por mucho tiempo, saliera a la luz y fuera
posible verlo. De esta manera, muchos engaños y malas intenciones, han
quedado al descubierto y en el aspecto positivo, muchas confusiones y
malos entendidos se han podido esclarecer.
Ni a nivel colectivo ni a nivel personal, es un
tema fácil a resolver, la disolución de la ilusión puede llevar a muchas
decepciones incluso, de personas que consideramos importantes o por
quienes sentimos amor profundo. Lo importante de este proceso no es
propiamente la desilusión o el dolor sino el aprendizaje.
Aprender a ser selectivos, brindarnos y
entregarnos solo a quien puede corresponder y apreciar lo que estamos
haciendo, es parte del camino. No es condicionar el amor ni la acción,
es restablecer el equilibrio del dar y recibir. Dejar de brindarnos a
quien solo busca beneficiarse a si mismo. Diferenciar entre compartir
por voluntad y compartir porque algo nos es arrebatado. Valorar a quien
está a nuestro lado, en nuestra misma frecuencia y tiene la capacidad de
ver y apreciar lo que somos al mismo tiempo que valoramos y apreciamos
lo que es.
Pero hay un aprendizaje más profundo en todo
esto y es el de aprender a accionar a tiempo, no de manera impulsiva, ni
pasiva… A TIEMPO. Conectarnos más con nuestros instintos para responder
de manera natural cuando se precisa una acción contundente.
Si te encuentras dentro de un proceso similar y
la verdad comienza a salir a la luz, no intentes controlar ni forzar
situaciones, no intentes que las cosas sean de la forma que tu quieres,
acepta las cosas tal y como son y toma el aprendizaje, esto hará que
puedas cerrar más rápidamente el ciclo.
Amor y verdad son la nueva frecuencia de la cuarta densidad… si la mentira se disuelve, así sea fuente de decepción ¡vamos por buen camino!.
Amor y verdad son la nueva frecuencia de la cuarta densidad… si la mentira se disuelve, así sea fuente de decepción ¡vamos por buen camino!.
Solo la Luz, revela la verdad…
¡Disfruta del proceso! Por: Harumi Puertos
Solo la Luz, revela la verdad…
ResponderEliminarMi querido Duendecillo, así es es, pero que doloroso es pulir el alma.
Un abrazote grande.
Ambar