Los síntomas gastrointestinales de la Enfermedad Inflamatoria
Intestinal (EII) pueden tener más que ver con el nivel de estrés que
con el nivel de la inflamación intestinal de un paciente, de acuerdo con
nuevos hallazgos.
En un estudio realizado en Canadá se ha encontrado que “Existe una fuerte relación entre los síntomas y el nivel de estrés percibido por los pacientes, pero no parece correlacionarse con el nivel de inflamación intestinal”, dice la Dra. Laura Targownik autora principal del estudio.
El tratamiento médico de la EII está destinado a aliviar los síntomas y prevenir complicaciones reduciendo la inflamación, pero existe evidencia de que algunos pacientes pueden tener síntomas gastrointestinales que son independientes de la inflamación. Los pacientes con EII que presentan síntomas, tienen niveles más altos de estrés percibido.
Con el objetivo de analizar la relación entre el estrés percibido, los síntomas gastrointestinales y la inflamación en la EII, se realizó un estudio en el que participaron 478 pacientes con EII que cumplimentaron encuestas sobre sus niveles de estrés y sus síntomas. Los pacientes también proporcionaron muestras de heces, lo que permitió a los investigadores medir la inflamación mediante la medición de la calprotectina fecal.
Los resultados del estudio mostraron una relación significativa entre el estrés percibido y la sintomatología que presentaban estos pacientes.
Sin embargo, no había relación entre el estrés percibido y la inflamación intestinal (que se define como un nivel de calprotectina fecal por encima de 250 mcg/g).
Los síntomas de la enfermedad no se relacionaron con la inflamación intestinal en la enfermedad de Crohn y sólo se relacionaron débilmente en el caso de la Colitis Ulcerosa.
Con base en los resultados, dijo la Dra. Targownik: “si intentamos tratar los síntomas gastrointestinales de estos pacientes aumentando el tratamiento anti-inflamatorio, éste no siempre es eficaz”.
El problema es que a menudo la evaluación de la actividad inflamatoria es difícil de obtener ya que, por ejemplo, la colonoscopia es una prueba invasiva, costosa y no se debe realizar con mucha frecuencia y las pruebas de imagen exponen a los pacientes a radiación y a otros inconvenientes.
La determinación de la calprotectina fecal es una buena medición de la inflamación intestinal. Sólo requiere que los pacientes recojan una muestra de las heces para analizar, pero todavía no está ampliamente disponible.
Los resultados de este estudio sugieren que ayudar a los pacientes con EII a lidiar con el estrés de forma efectiva, podría reducir la carga de los síntomas.
Dra. Targownik : “Es bueno decir a los pacientes que existe una relación entre el estrés y los síntomas. A veces, incluso el conocimiento puede ayudar a los pacientes a comprender el proceso de la enfermedad.”
En un estudio realizado en Canadá se ha encontrado que “Existe una fuerte relación entre los síntomas y el nivel de estrés percibido por los pacientes, pero no parece correlacionarse con el nivel de inflamación intestinal”, dice la Dra. Laura Targownik autora principal del estudio.
El tratamiento médico de la EII está destinado a aliviar los síntomas y prevenir complicaciones reduciendo la inflamación, pero existe evidencia de que algunos pacientes pueden tener síntomas gastrointestinales que son independientes de la inflamación. Los pacientes con EII que presentan síntomas, tienen niveles más altos de estrés percibido.
Con el objetivo de analizar la relación entre el estrés percibido, los síntomas gastrointestinales y la inflamación en la EII, se realizó un estudio en el que participaron 478 pacientes con EII que cumplimentaron encuestas sobre sus niveles de estrés y sus síntomas. Los pacientes también proporcionaron muestras de heces, lo que permitió a los investigadores medir la inflamación mediante la medición de la calprotectina fecal.
Los resultados del estudio mostraron una relación significativa entre el estrés percibido y la sintomatología que presentaban estos pacientes.
Sin embargo, no había relación entre el estrés percibido y la inflamación intestinal (que se define como un nivel de calprotectina fecal por encima de 250 mcg/g).
Los síntomas de la enfermedad no se relacionaron con la inflamación intestinal en la enfermedad de Crohn y sólo se relacionaron débilmente en el caso de la Colitis Ulcerosa.
Con base en los resultados, dijo la Dra. Targownik: “si intentamos tratar los síntomas gastrointestinales de estos pacientes aumentando el tratamiento anti-inflamatorio, éste no siempre es eficaz”.
El problema es que a menudo la evaluación de la actividad inflamatoria es difícil de obtener ya que, por ejemplo, la colonoscopia es una prueba invasiva, costosa y no se debe realizar con mucha frecuencia y las pruebas de imagen exponen a los pacientes a radiación y a otros inconvenientes.
La determinación de la calprotectina fecal es una buena medición de la inflamación intestinal. Sólo requiere que los pacientes recojan una muestra de las heces para analizar, pero todavía no está ampliamente disponible.
Los resultados de este estudio sugieren que ayudar a los pacientes con EII a lidiar con el estrés de forma efectiva, podría reducir la carga de los síntomas.
Dra. Targownik : “Es bueno decir a los pacientes que existe una relación entre el estrés y los síntomas. A veces, incluso el conocimiento puede ayudar a los pacientes a comprender el proceso de la enfermedad.”
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